En una noche que debía ser de alegría y celebración, la ciudad alemana de Magdeburgo se vio sacudida por una tragedia.
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Al menos cinco personas perdieron la vida y más de 200 resultaron heridas, muchas de ellas de gravedad, cuando un automóvil embistió a una multitud en un mercado navideño el viernes por la noche.
El primer ministro del estado, Reiner Haseloff, confirmó la cifra de víctimas este sábado y expresó su conmoción por el alcance del desastre. “Tenemos cinco muertos y más de 200 heridos, muchos de ellos graves y severos”, señaló Haseloff, destacando que el saldo fue mucho peor de lo que se temía inicialmente.
El incidente ocurrió en el corazón de Magdeburgo, donde familias y turistas disfrutaban de la atmósfera festiva del mercado navideño. Según las autoridades, el vehículo se dirigió directamente hacia las personas, dejando una estela de horror y confusión.
Investigación en curso
La Policía alemana investiga a un médico de 50 años, originario de Arabia Saudita, como principal sospechoso. El hombre, que reside en Alemania desde 2006 y trabaja en un poblado cercano, fue objeto de un allanamiento en su domicilio durante la noche. Las autoridades aún no han revelado los motivos del ataque ni han descartado posibles conexiones con otras causas.
Hasta el momento, las identidades de las víctimas fatales no han sido divulgadas, mientras los heridos reciben atención en hospitales locales. La comunidad de Magdeburgo, visiblemente afectada, se prepara para un servicio conmemorativo que tendrá lugar este sábado a las 19:00 en la emblemática catedral de la ciudad.
Un país en duelo
La tragedia ha resonado en toda Alemania. El canciller Olaf Scholz y la ministra del Interior, Nancy Faeser, llegaron a Magdeburgo para expresar su solidaridad con las víctimas y sus familias. Faeser ordenó que todas las banderas de los edificios federales ondearan a media asta en señal de duelo.
“El dolor que sentimos hoy como país no puede ser descrito en palabras. Nos solidarizamos con las familias de las víctimas y con los heridos que luchan por recuperarse”, declaró Scholz en un breve comunicado.
El mercado navideño, un lugar tradicional de encuentro y alegría, se ha convertido ahora en el escenario de una tragedia que marcará a Magdeburgo por mucho tiempo. Mientras las autoridades continúan con las investigaciones, la ciudad intenta encontrar consuelo en la unión y el apoyo mutuo en medio del dolor.