El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) activó una alerta amarilla en gran parte de la provincia de Misiones debido a la llegada de tormentas que podrían presentar características severas.



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Según el pronóstico, se esperan lluvias intensas acompañadas de ráfagas de viento, caída de granizo, fuerte actividad eléctrica y acumulados de agua que podrían oscilar entre los 20 y 40 milímetros, con la posibilidad de superar esos valores en algunas localidades.
La alerta rige desde este jueves 23 de enero, con el pico de intensidad previsto para la tarde. Abarca principalmente las regiones Sur y Centro de Misiones, incluyendo departamentos como Capital, Candelaria, Apóstoles, Oberá, y San Javier, entre otros. En contraste, la zona Norte no estaría tan afectada por fenómenos severos.
Fin de semana de lluvias leves y descenso térmico
El mal tiempo continuará hasta el sábado, aunque las tormentas perderán intensidad progresivamente. Para el domingo se espera un cielo cubierto pero sin precipitaciones significativas, trayendo un respiro a los habitantes de la provincia.
Las lluvias traerán consigo un notorio descenso de las temperaturas. Mientras que el miércoles se registraron máximas cercanas a los 39°C (con Posadas alcanzando los 38,3°C), este jueves el termómetro no superaría los 33°C. El sábado será el día más fresco, con una máxima de 29°C y una mínima de 21°C. A partir del domingo, las temperaturas comenzarán a subir nuevamente, alcanzando los 33°C el lunes, jornada que marcaría el regreso de lluvias y tormentas, aunque sin impacto significativo en las temperaturas.
Alivio para el riesgo de incendios
Las lluvias pronosticadas también representan una buena noticia frente a la crisis de incendios que afecta a Misiones. En lo que va de la semana, los índices de peligrosidad se han disparado, alcanzando niveles críticos. Este miércoles, seis departamentos –entre ellos Capital, Candelaria y Apóstoles– permanecían en alerta roja por riesgo extremo de incendios, mientras que otros, como General Manuel Belgrano, pasaron de alerta amarilla a naranja.
En lo que va de la semana, se han registrado numerosos focos ígneos en toda la provincia, lo que llevó al Gobierno provincial a declarar un estado de alerta. Sin embargo, si las precipitaciones se dan conforme al pronóstico, el índice de peligrosidad podría disminuir de manera significativa, trayendo un necesario alivio para los recursos naturales y las tareas de contención en el territorio.
El clima se presenta como un desafío constante, pero también como una oportunidad para mitigar los problemas más urgentes de la región. Este fin de semana, los misioneros no solo sentirán el cambio en el ambiente, sino que también podrán aprovecharlo para recomponer lo que las altas temperaturas y la sequía han puesto en jaque.