
Un individuo sospechoso fue arrestado en relación con el caso del homicidio de Carlos Fernández, asesor de la vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario, quien fue asesinado a tiros en el barrio capitalino de Boedo durante un presunto asalto.
La detención se llevó a cabo el sábado por la noche en Villa Fiorito, en la provincia de Buenos Aires, por agentes de la Policía de la Ciudad.
De acuerdo con informantes policiales, el sospechoso, identificado como C.I.G., fue identificado a través de huellas dactilares encontradas en el Peugeot 208 utilizado en el robo que resultó en el asesinato, abandonado en Villa Fiorito y rastreado por las cámaras de seguridad del Anillo Digital.
Además de la captura, se realizó un allanamiento en su residencia en Lanús, mientras se seguía trabajando para localizar a posibles cómplices. El detenido fue puesto a disposición del Juzgado Nacional en lo Criminal número 54.
Se informó que C.I.G. tenía un extenso historial delictivo que incluye condenas anteriores por robo y encubrimiento, habiendo cumplido penas en prisión en el penal de Magdalena y en el Tribunal en lo Criminal de Lomas de Zamora.
El crimen ocurrió cuando Fernández, de 63 años, fue abordado por dos delincuentes mientras estaba en la esquina de las calles avenida San Juan y Castro. Se cree que los ladrones intentaron robar su vehículo y, al no lograrlo, le dispararon en el pecho antes de huir.
Fernández, quien contaba con una destacada carrera en el ámbito justicialista, fue trasladado al Hospital Ramos Mejía, donde lamentablemente falleció.
Un testigo del incidente describió la vestimenta de los delincuentes, mencionando que uno llevaba una campera marrón y el otro un chaleco negro.

Fernández había sido asesor de la vicegobernadora Magario debido a su estrecha relación con líderes del partido durante su segundo mandato como vicegobernadora.