Mercados en rojo: el sacudón global golpea fuerte a la Argentina

El miedo a una recesión global volvió a golpear con fuerza y esta vez dejó una marca profunda en los mercados financieros.

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La jornada fue un verdadero sacudón, con caídas estrepitosas tanto en acciones como en bonos, empujadas por la tensión creciente de la guerra comercial desatada por el presidente estadounidense Donald Trump.

Los activos argentinos, como suele pasar en estas tormentas, fueron de los más golpeados. En Wall Street, los papeles locales se desplomaron hasta un 12%, en un clima cargado de incertidumbre y con los inversores saliendo a buscar refugio.

El riesgo país no tardó en reaccionar: se disparó a 925 puntos básicos, su valor más alto desde noviembre de 2024. Una señal clara de la desconfianza que pesa sobre la deuda argentina.

En el mercado de bonos, no hubo respiro en ningún tramo de la curva. El Global 2029 retrocedió 1,7%, mientras que el Global 2030 perdió 1,8%. En el tramo medio, los títulos a 2035 y 2038 sufrieron bajas de 2,7% y 2,4% respectivamente. Y los más largos no se quedaron atrás: el bono a 2041 cayó 2,7%, y el de 2046 terminó 2,9% abajo.

Las acciones tampoco se salvaron. El S&P Merval se desplomó 8,5% en dólares, quedando en apenas u$s 1.576. Entre las más perjudicadas estuvieron las de Banco Supervielle, TGS e YPF.

Aunque las bolsas de la región también mostraron números en rojo, la plaza porteña fue, por lejos, la más castigada. Mientras los índices de países vecinos bajaban entre 1 y 3%, acá la sangría fue mucho mayor.

En Nueva York, los ADR argentinos también recibieron lo suyo. Grupo Supervielle cayó 12,3%, BBVA Argentina 11,5%, YPF 10,6% y Edenor 10,4%. Una verdadera barrida.

Todo esto ocurrió luego de que Trump impusiera un arancel global del 10% sobre las importaciones, con medidas adicionales para unos 60 países. La movida fue tomada como una señal de endurecimiento en el comercio global y generó un fuerte rechazo en los mercados.

El impacto también se sintió en el precio del petróleo, que cayó casi un 7%, y en la tasa del bono del Tesoro a 10 años, que perforó el piso del 4% para ubicarse en 3,87%.

En este contexto, crece el temor a que estemos entrando en una nueva etapa de recesión global. Por eso, los operadores ya apuestan fuerte a que la Reserva Federal tenga que salir a recortar las tasas de interés antes de fin de año.

La incertidumbre manda y, por ahora, el mercado parece no encontrar piso.