En una serie de allanamientos simultáneos realizados ayer en Puerto Iguazú, la Policía detuvo a un presunto miembro de una banda acusada de un violento robo en el que se llevaron 18 millones de pesos.



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El operativo, desplegado por la Unidad Regional V, también resultó en el secuestro de dinero, un vehículo y otros elementos que podrían estar vinculados al delito. Mientras tanto, tres cómplices ya identificados permanecen prófugos.
La investigación dio un giro clave ayer por la tarde, cuando efectivos policiales allanaron tres viviendas en los barrios Almirante Brown y Las Orquídeas de la ciudad. En el procedimiento, fue arrestado un hombre de 27 años, sospechoso de participar en al menos tres asaltos a mano armada junto a sus cómplices. Durante los allanamientos, la policía incautó una réplica de pistola, un chaleco táctico, cartuchos de escopeta y calibre .22. Además, se secuestró un Toyota Corolla y $1.470.000 en efectivo, que podría formar parte del botín. También se encontraron prendas de vestir y celulares que están siendo peritados por especialistas del Cibercrimen.

La banda, compuesta por al menos cuatro personas, está bajo investigación por conformar una asociación ilícita con fines delictivos en la región. Se les atribuyen dos asaltos recientes ocurridos entre el domingo y el lunes. El primero fue a una pareja, a quienes les robaron un celular y una motocicleta Honda 150 cc. El segundo, más impactante, ocurrió la mañana del lunes, cuando los delincuentes interceptaron a dos empleados de una distribuidora y se alzaron con 18 millones de pesos, además de la camioneta Toyota Hilux en la que se desplazaban.
Gracias a un rápido operativo cerrojo, la Policía logró que los asaltantes abandonaran la Hilux en la ruta 12. En las cercanías, también fue hallada la moto robada, la cual había sido pintada para utilizarla en la fuga. Las pericias realizadas en ambos vehículos fueron cruciales para avanzar en la identificación de los sospechosos, ya que se encontraron huellas clave.

Las autoridades continúan con trabajos de campo en Puerto Iguazú y otras localidades cercanas, mientras que se ha solicitado la colaboración de las policías de Brasil y Paraguay para dar con los prófugos y recuperar el dinero restante.
Este golpe a la banda marca un importante avance en la investigación, aunque los esfuerzos continúan para capturar a los tres cómplices restantes, quienes ya han sido plenamente identificados por las autoridades.