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En una noche inolvidable para el fútbol paraguayo, la selección dirigida por el argentino Gustavo Alfaro logró un triunfazo al derrotar a Brasil 1 a 0, en un encuentro correspondiente a la octava fecha de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial de 2026. El partido se disputó en el emblemático Estadio Defensores del Chaco, donde el mediocampista Diego Gómez fue el gran protagonista al marcar el único gol del encuentro.
El tanto llegó a los 20 minutos del primer tiempo, cuando un rechazo defensivo brasileño quedó a merced de Gómez, quien, al borde del área, controló con maestría, enganchó hacia su izquierda y sacó un remate con el borde externo del pie derecho. La pelota impactó en el palo y entró de manera espectacular, desatando la euforia en las tribunas.
Brasil no se quedó atrás y tuvo su oportunidad más clara poco después del gol paraguayo. Vinicius Jr., uno de los jugadores más peligrosos de la “Verdeamarela”, desbordó por la izquierda y habilitó a Guilherme Arana, quien estaba a punto de empatar, pero su remate fue heroicamente despejado en la línea por Junior Alonso, el central de la Albirroja.
En el segundo tiempo, Paraguay apostó por los pelotazos largos y contragolpes rápidos, aprovechando los espacios a espaldas de los defensores brasileños. A pesar de los intentos de Brasil, la figura del arquero paraguayo Roberto Fernández se agigantó al desviar un potente disparo de Vinicius, mandando la pelota al córner y asegurando el resultado.
Este histórico triunfo representa apenas la tercera victoria de Paraguay ante Brasil como local en Eliminatorias, un logro que quedará en la memoria de los hinchas. Con este resultado, Paraguay se coloca en la séptima posición, en zona de repechaje, con nueve puntos. Por su parte, Brasil, que suma su cuarta derrota en el torneo, se mantiene en la quinta colocación con diez unidades, aún en puestos de clasificación directa al Mundial de 2026.
La victoria de Paraguay no solo significa un gran paso en las Eliminatorias, sino también un envión anímico clave para el equipo de Gustavo Alfaro, que sigue soñando con su boleto a la próxima Copa del Mundo.