Después de un mes de incertidumbre y angustia, esta mañana fue hallado el cuerpo sin vida de Hugo Samudio, el docente misionero que había desaparecido el pasado 13 de agosto en Eldorado.
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El hallazgo se produjo cerca del kilómetro 18 de la ruta provincial 17, en una zona boscosa. Uniformados del Servicio Penitenciario Provincial, en colaboración con la Policía de Misiones, encontraron el cadáver debajo de un árbol durante un operativo de rastrillaje.
Si bien aún resta el reconocimiento formal por parte de los familiares de Samudio, de 55 años, el documento del docente fue encontrado en el bolsillo del pantalón del cuerpo, lo que prácticamente confirma su identidad. Este detalle fue clave para que los investigadores pudieran avanzar con la identificación, ya que las características físicas del cadáver coinciden con las de la persona desaparecida.
El operativo de búsqueda se inició a las 9 de la mañana y contó con la participación de Wanda, la perra del Servicio Penitenciario, quien fue fundamental para localizar el cuerpo. Este se encontraba a unos 50 metros de la ruta, en una zona de monte. Según las primeras observaciones, el cadáver no presentaba un avanzado estado de descomposición, lo que sugiere que la muerte pudo haber ocurrido recientemente.
La desaparición de Samudio había generado una gran conmoción en la comunidad. Salió de su casa el 13 de agosto y no se volvió a tener noticias de él. Al día siguiente, su auto fue hallado abandonado en el kilómetro 14 de la misma ruta provincial 17, lo que intensificó la preocupación. Desde entonces, familiares, amigos y efectivos policiales se abocaron a su búsqueda.
Las causas de su muerte aún no fueron esclarecidas, pero fuentes cercanas a la investigación no descartan que pueda estar relacionada con un episodio vinculado a su diabetes, enfermedad que padecía. En las próximas horas se espera la confirmación del reconocimiento por parte de la familia y los resultados de la autopsia, que arrojarán más detalles sobre lo ocurrido.
El caso de Hugo Samudio ha conmovido a toda la provincia, y su trágico desenlace deja muchas preguntas por responder. Mientras tanto, la comunidad educativa de la Escuela Primaria N° 202, donde enseñaba a jóvenes de quinto grado, lamenta profundamente su partida y espera por el esclarecimiento de este triste episodio.