El Eternauta va por más: Darín confirmó que habrá segunda temporada y explicó por qué se enamoró del proyecto

La serie argentina que la rompe en Netflix ya tiene luz verde para continuar. Ricardo Darín contó cómo se sumó al rodaje y por qué hacer ciencia ficción nacional es una experiencia inolvidable.

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No es humo, no es hype, es realidad: El Eternauta, la serie argentina protagonizada por Ricardo Darín que escaló al top 3 de lo más visto a nivel global en Netflix, ya tiene confirmada su segunda temporada. Y no es por rating ni capricho de algoritmo: “La historia lo requiere”, explicó Francisco Ramos, vicepresidente de contenidos para América Latina de la plataforma.

Y si Netflix da el OK, Darín lo reafirma con esa mezcla de seriedad y ternura que lo caracteriza: “La historia completa termina con una segunda temporada. No es como otras series donde, si funciona, se estira. Acá es necesario contarla entera”.

De una oferta perdida al set de ciencia ficción

Lo más curioso es que Darín ya había tenido contacto con El Eternauta hace más de una década. “Me ofrecieron hacer el largometraje hace más de 10 años, pero después quedó en el camino”, contó. Sin embargo, esa primera chispa le quedó picando: “A partir de ese ofrecimiento, me llamó la atención y me sumergí a leer de qué se trataba”.

Y se enamoró. No solo del guion, sino de todo lo que implicaba darle vida a esa obra mítica del cómic argentino, escrita por Héctor Germán Oesterheld. Porque grabar ciencia ficción en Argentina no es cosa de todos los días. “Fue fantástico. Hay un nivel técnico y artístico muy alto”, dijo Darín, visiblemente emocionado.

Un equipo argentino, con calidad de exportación

La producción fue un punto fuerte. “Parte de lo interesante de este proyecto es que armaron un equipo muy bueno en todos los rubros para ir adelante con esta idea”, explicó el actor. Nada quedó librado al azar: efectos especiales, diseño de producción, dirección de arte, vestuario, maquillaje. Todo, hecho en casa.

“Durante el rodaje, para donde mirabas, te encontrabas con gente muy capacitada y muy enfocada. Estuvimos mucho tiempo juntos y sentimos que realmente estuvimos apoyados unos en otros”, relató Darín. Palabras que pintan de cuerpo entero el clima que se vivió en el set: profesionalismo, sí, pero también mística y compañerismo.

La historia que nos atraviesa a todos

El Eternauta no es solo ciencia ficción. Es memoria, es identidad, es resistencia. Nacida en plena década del 50, en un país agitado por dictaduras y sueños truncos, la obra de Oesterheld sigue siendo actual. Habla de invasiones, de supervivencia, de lo colectivo por sobre lo individual.

Darín lo entendió desde el minuto uno. Y ahora, con el respaldo del público mundial y el empuje de una producción de primer nivel, la historia seguirá su curso. Porque como él mismo dijo: “Si queremos contar la historia de principio a fin, tenemos que hacerla”.

Y vaya si la están haciendo.