“BCRA confirmó la transferencia de reservas de oro al exterior, pero mantuvo en secreto los destinos y advirtió sobre la difusión irresponsable de información.”
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El Banco Central de la República Argentina (BCRA) confirmó hoy que ha transferido parte de sus reservas en lingotes de oro al exterior. Sin embargo, la entidad no precisó los destinos a los que se enviaron los activos, manteniendo un alto nivel de confidencialidad respecto al manejo de la información. Según se detalló, al 23 de agosto de este año, las reservas en oro del país suman aproximadamente 4.981 millones de dólares.
En un comunicado de prensa, el BCRA, bajo la conducción de Santiago Bausili, informó que las transferencias se realizaron de manera exitosa entre sus diferentes cuentas. A pesar de las operaciones, la entidad destacó que el volumen total de las reservas en oro se mantiene sin cambios.
El comunicado subrayó que la administración de las reservas, que incluye no solo oro sino también divisas y otros activos externos, se rige bajo la Carta Orgánica del BCRA y la Ley 23.928. Desde hace más de una década, la entidad monetaria sigue empleando las mismas estrategias de manejo para sus reservas en oro, tanto en formato físico como electrónico.
El Banco Central también expresó su preocupación ante lo que consideró una “difusión irresponsable de información” en redes sociales. Recientemente, en la plataforma X, circulaban imágenes de camiones de caudales en rutas, acompañadas de insinuaciones sobre el traslado de reservas, lo que para la entidad ponía en riesgo la seguridad de estos activos.
El BCRA reiteró que la información sobre la administración de sus reservas siempre ha sido manejada con estricta confidencialidad, y que tanto la Auditoría General de la Nación como otros entes de control pertinentes tienen acceso a esos datos bajo las mismas condiciones de secreto.
En este contexto, el Banco Central se mostró firme en su postura de proteger la integridad y seguridad de las reservas del país, alertando sobre los peligros que representa la manipulación de información con fines políticos.