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En la localidad de San Isidro, un repartidor que transitaba por la calle Chacabuco al número 400 alertó sobre una varilla protruyendo del pavimento. Este reporte llevó al descubrimiento inesperado de un túnel de tres metros destinado a facilitar un robo en una sucursal bancaria.
Según informaron fuentes de la policía, el trabajador iba en una moto cuando notó que escuchaba ruidos provenientes del chasis de su vehículo. Por esto, se detuvo, bajó de la moto y observó que había una vara metálica clavada debajo de la calzada.
Después de notificar al personal de seguridad del banco, el repartidor alertó al 911. Posteriormente, agentes de la Comisaría 1ª de San Isidro se presentaron en el lugar, junto con un analista técnico que evaluó las alarmas del edificio. Tras confirmar su funcionamiento, los agentes descubrieron múltiples varillas metálicas enterradas en el sitio, no solo una.
Según informaron fuentes policiales, al extraer la vara metálica, se descubrió que estaba “conectada en tramos a lo largo de unos tres metros”. Ante esto, los agentes solicitaron la intervención de las autoridades de la DDI de San Isidro y del fiscal correspondiente, además de reforzar la seguridad en la zona.
Durante el día jueves se llevarán a cabo más labores de excavación con el fin de localizar el túnel. En este contexto, el fiscal ha dispuesto un operativo de excavación en la región de interés, con la finalidad de verificar si realmente se trata de un túnel diseñado para acceder a la sucursal de forma ilegal. La situación resultó tan inusual que incluso el intendente de San Isidro, Ramón Lanús, estuvo presente durante la operación.
Hasta el presente momento, las autoridades han confirmado que el pozo, que fue excavado con la ayuda de una máquina excavadora, logró alcanzar una profundidad aproximada de tres metros al finalizar la jornada. No obstante, las labores se detuvieron y se espera que la misión se complete a lo largo del día jueves.
Según las estimaciones del personal de policía siniestral, todavía sería necesario excavar alrededor de un metro y medio adicional para localizar el túnel. Los investigadores explicaron que el acceso al túnel simplificará la investigación, permitiendo determinar si la construcción del mismo estaba finalizada o en proceso.
Por el momento, no hay detenidos ni sospechosos en relación al suceso. No obstante, se prevé que la identificación de varios perfiles potenciales pueda surgir tras el hallazgo del punto inicial del túnel.
En este contexto, queda por averiguar si las cámaras de seguridad de la zona lograron captar el momento en que los responsables iniciaron los trabajos en el conducto subterráneo.