Boca Juniors está en la búsqueda de un nuevo director técnico tras la renuncia de Diego Martínez, y el nombre de Rodolfo “Vasco” Arruabarrena ha comenzado a tomar fuerza en las últimas horas.
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El Consejo de Fútbol del club ya se habría comunicado con el entrenador, pero su llegada no sería sencilla debido a su situación contractual actual.
Arruabarrena asumió hace apenas tres meses como entrenador del Al-Taawon FC, un club árabe, y cualquier intento de Boca por ficharlo implicaría un importante desembolso de dinero para liberar su contrato. A pesar de la complejidad, en el Xeneize están apurados por cerrar al sucesor de Martínez lo antes posible, con el objetivo de enderezar el rumbo del equipo en un presente futbolístico que no está a la altura de las expectativas del club.
Otras opciones y el interés del “Vasco” por volver
Si bien se mencionaron otros nombres como Guillermo Barros Schelotto y Fernando Gago, el de Arruabarrena parece haber ganado terreno, aunque aún no hay nada concreto entre las partes. El ex lateral izquierdo de Boca ya manifestó en varias oportunidades su deseo de regresar al club donde vivió grandes momentos como jugador y entrenador.
“Tengo un sentido de pertenencia y obviamente que me gustaría volver a dirigir”, declaró el “Vasco” en 2021, dejando en claro su interés por un eventual regreso a La Ribera.
El ciclo del “Vasco” en Boca: luces y sombras
Rodolfo Arruabarrena ya dirigió a Boca entre 2014 y 2016, donde tuvo un ciclo destacado con 47 victorias, 13 empates y 15 derrotas en 75 partidos, alcanzando una efectividad del 68%. En ese período, logró conquistar una Copa Argentina y el Campeonato de Primera División en 2015, dándole alegrías a los hinchas xeneizes.
Sin embargo, su paso por el club no quedó exento de polémicas, ya que las eliminaciones ante River Plate, tanto en la Copa Sudamericana 2014 como en la Copa Libertadores 2015, fueron golpes difíciles de digerir. Especialmente recordado es el episodio del gas pimienta en aquel superclásico copero, que marcó un antes y un después en su gestión.
Ahora, la posibilidad de que Arruabarrena vuelva a ponerse el buzo de DT de Boca está en el aire, aunque su retorno depende de varias variables, entre ellas, la capacidad del club para resolver su situación contractual con el equipo árabe.