En las redes sociales ya nada sorprende. Pero esta vez, lo que muchos tiktokers empezaron a hacer por “salud” está generando alarma entre médicos y especialistas del sueño



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Se trata del mouth taping, o, dicho más criollo, taparse la boca con cinta para dormir. Sí, así como lo leés. La promesa es tentadora: dormir mejor, dejar de roncar, tener menos ansiedad y hasta una mandíbula más marcada. Pero, como en casi todo lo que se viraliza en internet, la historia real es bastante más complicada.
Una tendencia que creció sin freno (ni evidencia)
Todo arrancó con influencers que, entre rutina matinal y baño de hielo, mostraban cómo dormían con la boca sellada con cinta médica. En TikTok, el hashtag #mouthtaping explota: más de 96 mil publicaciones y miles de testimonios diciendo que les “cambió la vida”. Hasta el mismísimo Erling Haaland, estrella del Manchester City, dijo que lo usa hasta cuando entrena. Pero claro… no todo lo que brilla es descanso.
Según explicó el Dr. Brian Rotenberg, otorrino y autor de un estudio en la revista PLOS One, la tendencia se presenta como mágica, pero no hay evidencia sólida que respalde sus beneficios. Y eso no sería tan grave si no fuera porque, en algunos casos, puede ser peligrosa.
El riesgo escondido: la apnea del sueño
El principal problema, señalan los expertos, es que mucha gente usa esta técnica sin saber que padece apnea del sueño, un trastorno serio donde la respiración se interrumpe repetidamente durante la noche. Y si encima se sellan la boca… el combo puede ser fatal. “Taparse la boca puede ser un grave riesgo de asfixia en personas con obstrucciones nasales o problemas gástricos”, explicó el Dr. Rotenberg.
Desde España, el Dr. Carlos O’Connor Reina, miembro de la Sociedad Española del Sueño, fue claro: si respirás mal por la nariz y encima te cerrás la boca, el cuerpo entra en emergencia. No hay descanso que valga.
Ansiedad, ahogo y falsos resultados
Otros efectos no deseados que ya se están viendo incluyen sensación de claustrofobia, microdespertares, irritación en la piel, ansiedad nocturna, y hasta un empeoramiento de la apnea si no está diagnosticada. Todo esto, por seguir una moda.
Lo curioso es que lo que se busca —dormir mejor, dejar de roncar, respirar por la nariz— sí se puede lograr, pero con otras herramientas. Tirillas nasales, ejercicios del paladar, cambios de postura al dormir y, sobre todo, una consulta médica son opciones mucho más seguras.
¿Y la mandíbula perfecta?
Una de las razones que impulsó la tendencia fue la supuesta “definición facial” que genera dormir con la boca cerrada. Pero, de nuevo, los especialistas son categóricos: no hay ninguna prueba científica de que esto funcione. A lo sumo, una correcta postura lingual (lengua hacia arriba y adelante) puede favorecer la respiración nasal y tener un efecto mínimo, pero no va a esculpirte la cara como si fuera Photoshop.
¿Entonces? Respiración nasal sí, cinta no
Respirar por la nariz es, sin duda, más saludable: filtra el aire, lo humedece y ayuda a dormir mejor. Pero eso no significa que debamos andar pegándonos cinta como si fuera solución mágica. El problema con estas modas virales es que simplifican algo complejo como el descanso y lo transforman en un tutorial de 15 segundos.
En resumen: si roncás, dormís mal o te levantás cansado, no te pegues la boca. Pegá primero un llamado al médico. Porque cuando se trata de salud, no todo lo que está en tendencia es lo que te conviene.